—Podrías hacer una novela con mi vida, Salva.
Es entrañable que cada cual se sienta protagonista de una novela. Es un buen mecanismo ése el de considerarse centro del universo para tirar hacia delante. Mucho mejor que asumir nuestra mediocridad, lo días iguales y la falta de alicientes.
Un buen escritor puede narrar una historia potente también de la más pura nadería, de esas personas que, siendo más o menos previsibles, se ven como reyes del mambo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario