x

¿Quieres conocerme mejor? Visita ahora mi nueva web, que incluye todo el contenido de este blog y mucho más:

salvador-navarro.com

sábado, enero 23, 2021

Abrazo

No hay momento más feliz que cuando lo abrazo antes de dormir.

Fran siempre se queda frito antes que yo, mientras yo leo o veo alguna peli. Es justo tras apagar la luz o la tele cuando el silencio se apodera de todo. No es una oscuridad que asuste.

Paso mi brazo por encima de él hasta rodearlo y él, dormido, lo agarra con fuerza en su pecho. Yo me acoplo y me abandono al placer de atravesar la frontera nebulosa entre los mundos que separa el sueño.

Caigo, dulcemente, como envenenado por un cianuro infantil.

No hay mayor felicidad que ese brazo perdiendo la circulación sanguínea. El Fran dormido lo aprieta en sueños que no recuerda. No sé a qué hora será en la que nos recolocamos. Yo trato de girar y Fran se aferra, en su mundo onírico, a mi brazo aprisionado.

Él no cree, con la luz del día, las cosas que yo le cuento.

Lo más hermoso es confirmar, en los escasos instantes en que recupero el contacto con la realidad, que siempre buscamos un punto de contacto. Los pies, las caderas, las manos, un dedo... Hay carne con carne.

Nos buscamos.

Cae cada día la noche y ansío el momento cumbre. Apago la luz y cruzo mi brazo alrededor de su pecho. Él, dormido, lo agarra y yo subo al cielo.

No hay comentarios: