x

¿Quieres conocerme mejor? Visita ahora mi nueva web, que incluye todo el contenido de este blog y mucho más:

salvador-navarro.com

jueves, abril 15, 2021

Bumerán

Cuando echas algo en cara a alguien tienes que estar dispuesto a que hagan lo mismo contigo.

Es un ejercicio que puede ser sano, porque tendemos a vernos estupendos y sólo observamos los defectos en piel ajena, por lo que a veces viene bien hablar con franqueza a alguien querido si quieres comprobar cómo se le ve a uno desde fuera.

A mí me ha ocurrido más de una vez el llevarme un sofocón por comentarios certeros que hacen sobre mí, y me ha servido para crecer como persona, porque la gente que me aprecia ve en mí defectos que yo no tengo valor de admitir.

Uno de mis mayores errores siempre ha sido considerar que la gente ve el mundo como yo lo veo, sin entender una regla básica: cada cual tiene su escala de valores, sus prioridades en la vida y sus condicionantes.

Lo que no quiero es dejar de comentar a los demás cómo yo los veo, porque si nos encerramos en un no hablar por no molestar acabamos encerrados en esferas falsamente protectoras que nos hacen recrearnos en nuestras propias verdades, chiquitillas como canicas.

Para ser grande hay que ser valiente y exponerse a hablar de lo que nos inquieta. De ti, de mí y de los otros. Cerrar los ojos y la boca es morir un poco.

No hay comentarios: