x

¿Quieres conocerme mejor? Visita ahora mi nueva web, que incluye todo el contenido de este blog y mucho más:

salvador-navarro.com

viernes, marzo 05, 2021

Alonso

No era el único español allí, pero él era la estrella.

Nos habían invitado a la boutique de Renault en los Campos Elíseos para la presentación del nuevo monoplaza de Fórmula 1 de Fernando Alonso.

Allí nos presentamos Brigitte y yo, bien maqueados los dos. Gracias a ella habíamos conseguido unas invitaciones muy codiciadas y era reducido el número de personas que esperábamos a que se abriese el telón para que apareciese el piloto asturiano y su bólido.

Nos soltó un discurso en inglés, entre vídeos espectaculares, y pasamos al cóctel en la planta alta.

Dile algo, Salva me insistía Brigitte. Es tu paisano.

Yo me hacía el loco. Ya me sentía afortunado con mi copa de champán, la gente guapa y las conversaciones triviales en esa noche impecable. Todos los corrillos se formaban en torno a él.

Cuando el alcohol había subido, Brigitte se desinhibió con un grito.

¡¡¡Fegggnando!!!

El hombre se giró y se encontró de bruces con Brigitte, vestida de turquesa, y un Salva enchaquetado que no sabía para dónde mirar. Se acercó a nosotros.

Aquí tienes a Salva, tu compatriota —y se quedó tan pancha.

Él me dio un abrazo, quizás por sus nervios de recién llegado a mi empresa, y me preguntó qué tal me iba por París. 

Entonces comprendí la felicidad infantil que produce vivir momentos de los que vas a fardar.

¿Dónde habré metido ese selfie que nos hicimos?

No hay comentarios: