De Afganistán aprendimos, desgraciadamente, un término que utilizo mucho.
Talibán.
Hay mucho talibán fuera de Afganistán. En mi misma calle, en mi trabajo, en mi familia.
Nos cruzamos con ellos a diario, gentes que nos regalan sonrisas, que nos saludan, que se interesan por saber cómo estamos, que no te tiran piedras físicas.
Pero quisieran.
Gentes radicales que todo lo juzgan con un prisma inamovible, sesgado, rotundo, inmisericorde.
No hay comentarios:
Publicar un comentario