Siempre he defendido como estrategia propia el mantenerse alerta planificando nuevos proyectos.
Creo que es un soberano error la actitud pasiva de quien ve las cosas venir y, en función de como vengan, se estructura.
Lanzarme en el proyecto de la película NTSP ha supuesto un giro nuevo a mi vida. Seis meses codo a codo con Manuel Benito de Valle organizando el guión mientras, en paralelo, realizábamos el casting y llamábamos a todas las puertas posibles buscando financiación y voluntarios que se sumasen a esta aventura.
A través de Santi, un día recibí un email. Una actriz amiga de él, Carmen Tamayo, se ofrecía para participar en la película. Acababa de leerse la novela y me pidió, con entusiasmo, interpretar el papel de Gloria.
Todo ocurrió con unas cuantas cervezas en la Alameda.
Tras hacer las correspondientes pruebas para el casting no había duda. Carmen sería Gloria.
La pasada semana estuvo con nosotros en Portugal. Ocurrente, sensible, culta, divertida, humana.
Cuando las primas de riesgo absorben nuestras energías, pasamos indiferentes ante las hambrunas de Somalia y el mundo parece no tener solución, de pronto aparece un ángel.
Carmen nació en una familia humilde de agricultores y se le cae la baba hablando de sus padres. Hace unos días fuimos a Prado del Rey, su pueblo gaditano, para encontrarnos con los paisajes de los que nos hablaba estas últimas semanas.
Luchadora y curranta, se ríe de su sombra hablando de sus primeros pasos en Madrid o te enternece al extremo recordando sus amores perdidos.
Qué placer encontrar personas que te hagan creer con fuerza en el ser humano.
Creo que es un soberano error la actitud pasiva de quien ve las cosas venir y, en función de como vengan, se estructura.
Lanzarme en el proyecto de la película NTSP ha supuesto un giro nuevo a mi vida. Seis meses codo a codo con Manuel Benito de Valle organizando el guión mientras, en paralelo, realizábamos el casting y llamábamos a todas las puertas posibles buscando financiación y voluntarios que se sumasen a esta aventura.
A través de Santi, un día recibí un email. Una actriz amiga de él, Carmen Tamayo, se ofrecía para participar en la película. Acababa de leerse la novela y me pidió, con entusiasmo, interpretar el papel de Gloria.
Todo ocurrió con unas cuantas cervezas en la Alameda.
Tras hacer las correspondientes pruebas para el casting no había duda. Carmen sería Gloria.
La pasada semana estuvo con nosotros en Portugal. Ocurrente, sensible, culta, divertida, humana.
Cuando las primas de riesgo absorben nuestras energías, pasamos indiferentes ante las hambrunas de Somalia y el mundo parece no tener solución, de pronto aparece un ángel.
Carmen nació en una familia humilde de agricultores y se le cae la baba hablando de sus padres. Hace unos días fuimos a Prado del Rey, su pueblo gaditano, para encontrarnos con los paisajes de los que nos hablaba estas últimas semanas.
Luchadora y curranta, se ríe de su sombra hablando de sus primeros pasos en Madrid o te enternece al extremo recordando sus amores perdidos.
Qué placer encontrar personas que te hagan creer con fuerza en el ser humano.
3 comentarios:
Afortunado tú al rodearte de esta especie en extinción de ángeles terrestres ;-)
Disfruta la experiencia.
Sólo un comentario a tu segundo párrafo. Partiendo de la base de que me parece deseable (más bien una cible) lo que dices, compartiré contigo mi impresión basada en mi experiencia: el ser humano es muy malo previendo el futuro (planificando), pero es muy bueno adaptándose. Se ve que el punto optimo es hacer un planning e ir modificandolo conforme a las contingencias diarias: justo lo que yo voy a hacer ahora mismo.
Salu2 desde la trinchera.
Fernando
Carmen es muy grande sí, a mí me abrío las puertas de su ciudad, me regaló su calor y su cercanía... y lo disfruto cada día. Ángel o demonio, Carmen...
Gracias.
Publicar un comentario