x

¿Quieres conocerme mejor? Visita ahora mi nueva web, que incluye todo el contenido de este blog y mucho más:

salvador-navarro.com

domingo, mayo 09, 2021

New York

Llegar por primera vez a Nueva York es un regalo que todo humano debería disfrutar una vez en la vida.

Es tal la majestuosidad con que la ciudad te recibe, cuando sales de los andenes de la Grand Central Station, que comprendes en un segundo la grandeza y pequeñez del ser humano, por encima de todo tratado filosófico.

Manhattan demuestra la fuerza del hombre por crear, al tiempo que la propia creación lo devora en su inmensidad.

Cuando levantas la vista al cielo y observas la torre Chrysler la emoción sube por la garganta. ¡Qué alto hemos llegado!. Giras entonces la cabeza y observas la burrada de ladrillos, de gente, de ruido, de cristal, acero, luminosos, taxis, gente con prisas, claxones, tantos estímulos desde tantos lados que de pronto te sientes diminuto, intranscendente, una hormiga más.

Visitar por vez primera Nueva York no debería ser un lujo, sino obligación. Es volver a visitar el vientre materno y salir de golpe al exterior con todas las sensibilidades dispuestas a maravillarse con las contradicciones del hombre.

No hay comentarios: